Con una jornada que lleva por nombre “Experiencia Chieri”, el CEST dio la bienvenida a los estudiantes de primeros medios, donde se les ofreció un espacio de formación y desarrollo como alumno salesiano. A través de esta experiencia se invita a los alumnos a ser parte del Colegio, conocer su casa de estudios, no tan solo desde los aspectos reglamentarios de convivencia, sino que también desde la espiritualidad que da vida a todas las actividades educativo pastorales del CEST. La primera jornada se llevó a cabo el 19 de marzo, para los alumnos de primeros medios A y B Humanista Científico y B y C Técnico Profesional.
Los temas abordados en esta jornada fueron la vida de don Bosco, especialmente en sus años de juventud en Chieri, Italia, impartido por el rector Reinaldo Castro; y la escuela como espacio de encuentro, sana convivencia, formación valórica y la alegría como expresión del carisma salesiano, impartido por los profesores jefes y asesores de pastoral juvenil del CEST.
El encuentro culminó con la celebración de la Eucaristía, presidida por el padre Darío Navarro, director de la Presencia Salesiana en Talca. El padre Darío explicó a los alumnos el significado de las actividades que se realizan en el CEST, empatizando con ellos las posibles preguntas que podrían estar haciéndose, como “por qué tenemos que estar cantando, jugando, conversando, celebrando misa, qué tiene que ver con ser un alumno salesiano, lo que esperamos responder en su estadía en el CEST”, acotó.
“Nuestro Colegio tiene como centro a Jesús, con una espiritualidad particular, que es la espiritualidad de San Juan Bosco, de quien conocimos al inicio de esta jornada, y cuál es la particularidad de don Bosco, que en el centro de toda su vida está Jesús, él hizo una experiencia de Dios, que lo invitó a descubrir un proyecto de vida y una misión en esta sociedad, y nosotros tenemos la misión de ayudarlos a ustedes a profundizar su fe, que conozcan más a Jesús, igual como lo hizo don Bosco en su tiempo”, destacó el sacerdote.
Asimismo, el padre Darío, instó a los jóvenes a poner una intención al celebrar la Eucaristía, manifestándoles el sentido y la importancia de creer, de tener fe en Jesús. “¿Qué pasa si nosotros tenemos una situación negativa en nuestra vida y nos centramos sólo en nosotros mismos, creyendo que solo nosotros podremos dar respuesta a eso, lo más probable que las fuerzas y soluciones sean limitadas, pero qué pasa si yo me aferro a Jesús, y como lo hizo don Bosco, enfrento esa realidad con una fuerza distinta, porque hay más esperanza, porque la fuerza viene de otro, de otro más grande que yo, porque Jesús nos acompaña y nos fortalece”, puntualizó el Padre Director.
En el momento de acción de gracias, el padre Eduard Rojas, coordinador del Área de Evangelización, invitó a los estudiantes a sacar y levantar sus corbatas, para ser bendecidas, y a la vez ellos recibir la bendición por ser alumnos nuevos del CEST.
El padre Darío impartió esta bendición especial, acogiendo a los jóvenes e instándolos a participar en la experiencia de ser un alumno salesiano, un buen cristiano y honesto ciudadano. Luego impartió la bendición final para todos los presentes.
Cabe recordar que en Chieri, Italia, don Bosco cursó el sexto grado, más o menos primero de enseñanza media en la actualidad. El período de la vida de don Bosco como estudiante en Chieri, abarca desde 1831 a 1835, aproximadamente desde los 16 a los 20 años. Allí desarrolla las distintas dimensiones de la vida: física, espiritual, intelectual y relacional. También asume esta vida, desde la responsabilidad, y haciendo de la fe y de la compañía de otros una de las claves que orienta su vida y su decisión.
