Salesianos Talca
Como es tradicional, en el Centro Educativo Salesianos Talca, el 24 de noviembre se celebró la ceremonia de titulación de 185 jóvenes, que ya están en el mundo laboral y/o en estudios superiores.
Los alumnos debieron culminar todo el proceso formativo y de práctica profesional, según su especialidad, para lograr la obtención del título que otorga el CEST y el Ministerio de Educación. El año 2023 se titulación 39 jóvenes de Mecánica Industrial; 46 de Mecánica Automotriz,39 de Electricidad; 26 de Gráfica y 35 de Electrónica.
La ceremonia de titulación comenzó con el ingreso de los jóvenes y la entonación del himno nacional.
En su discurso, el padre Darío Navarro, director de la Presencia Salesiana en Talca, indicó que recibir un título profesional es un gran logro, ya que los jóvenes tendrán una herramienta que les abre puertas en el mundo laboral, permitiéndoles aportar a la sociedad con sus conocimientos y habilidades. “Sabemos que la ciencia y la técnica son elementos importantes y ojalá que constantemente se preocupen de estar especializándose y creciendo en conocimientos”, agregó el sacerdote.
“Hemos tratado de motivarlos a mirar el trabajo como un valor, del cual pueden disfrutar, ¡qué gustoso en disfrutar el fruto del propio trabajo!, pero no es sólo para el propio beneficio, sino para compartirlo con los demás”, puntualizó el padre Darío.
El Rector Reinaldo Castro se refirió a la misión salesiana en estos 135 años de presencia en Talca, señalando que los salesianos le han dado a la educación técnico profesional el impulso que se requiere para el desarrollo de los jóvenes. “Que los jóvenes sientan que son amados, que los jóvenes sientan que pueden ser protagonistas de su desarrollo, para aportar al crecimiento productivo de la región y del país”.
“No ha sido fácil estar a la vanguardia, pero, la realidad laboral y social, sigue siendo un desafío para crecer en todas las dimensiones; desafíos que se presentan cada año, con sus realidades, con sus necesidades y sus sueños”, concluyó el Rector.
El resultado de una obra depende del esfuerzo y del amor con que se realiza. En el pensamiento de don Bosco, siempre estuvo presente el reconocimiento para aquellas personas que con esfuerzo y dedicación dieron lo mejor de sí para alcanzar sus ideales. En esta ceremonia se reconocieron a los alumnos que han sido destacados como los mejores titulados de cada especialidad de la generación 2023. Se trata de los estudiantes Sebastián Burgos de Mecánica Industrial; Alejandro Vera de Mecánica Automotriz; Diego Prieto de Electricidad; Luis Vergara de Gráfica y Francisco Quinteros de Electrónica.
En representación de los titulados, el alumno Francisco Quinteros entregó un mensaje de despedida, en el cual recordó momentos vividos en el CEST, y agradeció a profesores y asistentes de la educación por el acompañamiento y apoyo. “Estamos plenamente agradecidos de nuestros profesores y guías espirituales, que con paciencia y dedicación nos han ayudado a comprender la importancia de ser buenos cristianos y honestos ciudadanos. Esa esencia salesiana que se nos impregno cada día en el colegio, la cual nos ha brindado una educación que va más allá de lo académico, abrazando nuestros corazones y guiándonos hacia una comprensión más profunda de nuestra fe y valores”, manifestó Francisco.
Al concluir, el padre Darío dijo que esta ceremonia no es solo una despedida, es una acción de gracias a Dios por los jóvenes que se titularon, y un envío porque son hijos de un padre soñador, como lo fue don Bosco. Dicho esto, el padre Darío Navarro convocó al Espíritu del Señor e impartió la bendición final.
La promoción de alumnos de las modalidades científico humanista y técnico profesional año 2023 del CEST celebró su licenciatura, el 22 y 23 de noviembre, en un año marcado por las actividades conmemorativas de los 135 años de presencia salesiana en Talca. La ceremonia estuvo marcada por el ideario de los sueños de Don Bosco de los nueve años y de la misión salesiana en América del Sur.
El padre Darío Navarro, director de la Presencia Salesiana en Talca, en su discurso indicó a los jóvenes que son parte de la generación de los 135 años y quedarán en la historia del colegio; señaló que están en la etapa de la vida que se caracteriza por soñar y tomar opciones. “Están llamados a construir autonomía, pero no en solitario, sino dejándose acompañar por sus seres queridos”.
El Padre Director manifestó que el colegio los ha formado y le ha dado las herramientas para seguir creciendo, instándolos a aportar al mundo desde lo que es cada uno, centrando sus miradas en los valores y principios propios de la espiritualidad salesiana. “La razón, que sabe argumentar, que explica los acontecimientos y puede comprender lo que sucede; la religión, que busca centrar la mirada en Jesucristo que dio la vida por ti, que te permite trascender la realidad, para sentirte plenamente acompañado y bendecido; y el amor, que es aquello que forma parte de tu identidad, siendo capaz de amar a otros y sintiendo el amor que te tienen, te da seguridad y te empodera para luchar y amar”.
Reinaldo Castro, rector del CEST, recordó la relevancia de ser parte de esta casa salesiana y la alegría de ser hijos de un padre soñador como don Bosco. “Como Dios nos soñó, don Bosco también nos soñó, y somos parte de esta historia, porque vamos juntos formando este proyecto, que esperamos siga creciendo para muchas generaciones más”.
Terminadas las palabras del Padre Director y Rector, los estudiantes recibieron sus licencias. Como toda obra salesiana, la música es fundamental para alegrar el alma, inspirando y despertando sueños. Se presentó la orquesta dirigida por el profesor Carlos Valdés, quienes interpretaron los temas: o sole mío, tango imperial y hacia un sueño desconocido.
“Los sueños no se cumplen, se trabajan”, con esta frase de inspiración se realizó la premiación, donde se reconoció a los estudiantes que, durante su formación integral, trabajaron arduamente en los distintos ámbitos. Se premiaron a los alumnos con mejor desempeño académico, mejor egresado de la modalidad humanista científico y técnico profesional, permanencia y premio a la responsabilidad.
En esta ceremonia se entrega la distinción más importante y significativa que otorga la Comunidad Educativa, que es el premio Don Bosco. El padre Darío Navarro junto al rector Reinaldo Castro entregaron el premio al joven de la generación que logra ser fiel a los valores cristianos y salesianos. El año 2023 lo recibieron los alumnos Matías Escalona Torres de 4°HC y Benjamín Oyarce Letelier de 4°ATP.
Un alumno representante de sus compañeros licenciados, en cada ceremonia, entregó su mensaje de despedida. En la modalidad humanista científico Máximo Meza de 4°AHC; en la ceremonia de cuartos A y B técnico profesional lo hizo el alumno Sebastián Garrido de 4°BTP, y en la ceremonia de los cuartos C, D y E técnico profesional lo hizo Diego Jaque de 4°ETP.
En 135 años son muchos los jóvenes que se han formado bajo la impronta de don Bosco. Los alumnos en sus mensajes destacaron el tiempo difícil que les tocó vivir por la pandemia, no sin esfuerzo por salir adelante; reconocieron la buena formación y valores recibidos, como también agradecieron a todos los integrantes de la comunidad educativa, profesores, asistentes de la educación y sacerdotes. Al relevar el sueño de los nueve años de Don Bosco, mencionaron sus propios sueños.
“También debemos recordar que nuestros sueños son una parte fundamental de lo que somos. Los sueños nos inspiran, nos dan un propósito y nos ayudan a superar obstáculos. No importa cuán difíciles sean las circunstancias, siempre podemos elegir perseguir nuestros sueños con pasión y determinación. En este momento de despedida, quiero alentarlos a nunca dejar de soñar, que cada uno pueda construir un mundo mejor”, manifestó Máximo Meza de 4°AHC.
Al concluir la ceremonia, se invitó a los alumnos a entonar por última vez el himno del CEST, con su mano en la insignia, significando la adhesión al CEST. Se realizó el signo de la luz, instando a los jóvenes a ser luz para el mundo, donde el padre Darío Navarro, entregó la luz a los presidentes de curso, como signo de envío a llevar la luz a los lugares donde tengas que compartir y vivir.
Se impartió la bendición y se escuchó la canción del Adiós para la salida de los estudiantes que, acompañados de sus profesores jefes, se despidieron de su Colegio, dejando atrás la enseñanza media e iniciando un nuevo camino.
La Comunidad Educativa Salesiana se congregó en la celebración de la eucaristía, el 14 de noviembre en el gimnasio del CEST Sede Sur, para despedir a los estudiantes de cuartos medios; celebración a la que asistieron los padres y apoderados de los alumnos. La misa fue presidida por el padre Darío Navarro, director de la Presencia Salesiana en Talca, cuya intención fue agradecer a Dios por las maravillas que ha obrado en los jóvenes que egresarán del CEST.
Los alumnos de la promoción 2023 son los jóvenes de los 135 años de la presencia salesiana, su paso quedará marcado por la historia. La eucaristía fue un momento familiar, en donde en comunidad se pidió por las intenciones de los estudiantes.
El padre Darío en la homilía indicó que es muy significativo estar acompañados por los padres, porque es un signo de que somos familia. “Es significativo porque implica mirar hacia atrás, mirar la historia, mirar la vida, mirar quiénes nos ha acompañado, y ojalá nunca pierdan la oportunidad de estar mirando la propia vida, lo que uno va viviendo, porque ahí aparecen personas; aparecen circunstancias, acontecimientos, personas que nos han ayudado a formarnos”, señaló el sacerdote.
El Padre Director les dejó una pregunta a los jóvenes: ¿ustedes sienten que Dios ha hecho cosas buenas en ustedes, en este tiempo de su vida? Agregando que siempre cuando miramos hacia atrás, debemos mirar la bondad de Dios, porque mirar hacia atrás es proyectar el futuro.
En esta eucaristía se ofreció la tierra que los jóvenes van a conquistar en esta nueva etapa; la luz que iluminará su camino y el agua para limpiar los nuevos rumbos. Todos estos signos fueron presentados junto al pan y el vino, que luego se convertirían en el cuerpo y sangre de Jesús.
En el momento de acción de gracias se premió el trabajo, el esfuerzo y el espíritu salesiano de los estudiantes que se destacaron en ACLE, mejor compañero y pastoral.
El CEST despidió a los alumnos de cuarto medio, instándolos a iniciar un nuevo camino sin olvidar lo vivido, proyectando el futuro hacia un gran horizonte. La comunidad educativa encomendó la vida de los jóvenes a Dios y a la Madre Auxiliadora. (Para ver la galería de fotos, pinchar en la imagen que sigue).
El 12 de noviembre se celebró una eucaristía de agradecimiento a las personas que ayudaron a la restauración del Santuario María Auxiliadora, después de aquella noche del 11 de noviembre de 2019, cuando un grupo de personas, movidas por las manifestaciones que se produjeron a nivel nacional, irrumpieron de forma violenta en este santuario mariano de Talca, destruyendo imágenes, saqueando las bancas del templo y profanando el Sagrario. La misa fue presidida por monseñor Galo Fernández, obispo de Talca, y concelebrada por los sacerdotes salesianos padre Belarmino Sánchez, rector del Santuario, y padre Darío Navarro, director de la Presencia Salesiana en Talca.
Estos hechos remecieron a todo el pueblo católico de Talca y sus alrededores que, en ese día al celebrar la eucaristía, se pidió por la paz. El obispo Galo recordó estos momentos de dolor, incluida la pandemia, agradeciendo el apoyo de muchos talquinos, como también agradeció el apoyo de la Fundación Ayuda a la Iglesia que sufre, que aportó recursos para restaurar el templo.
En la homilía indicó que los cristianos somos porfiados en la esperanza, agregando que ante una irrupción como esa, daban ganas de responder con fuerza, pero eso no es cristiano, sino que “lo nuestro es responder con mansedumbre al ejemplo Jesucristo que, en la cruz es capaz de decir: Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen”.
“Quienes fueron impulsados por esta actitud violenta de hacer daño, no saben lo que hacen, y también son hijos de Dios, por eso nuestra respuesta es no a la violencia, sí al amor, la porfía de la esperanza de seguir el evangelio de Jesús, de querer levantar el santuario, y con un empeño propio de don Bosco, de pensar en los chiquillos tal vez más rebeldes, y decir que algo les ha faltado en sus vidas, por eso reaccionan así, nosotros les respondemos con amor, con mansedumbre, con la porfía de la esperanza”, acotó el obispo.
Sin duda una misa muy emotiva que reunió a los fieles del santuario y de la familia salesiana, que oraron por la paz de Chile, por las autoridades, por los sacerdotes, religiosas, educadores, familias y toda la comunidad para continuar por los caminos de esperanza, de unidad y de paz.
Ya finalizada la eucaristía, el padre Belarmino Sánchez, rector del Santuario agradeció al obispo Galo Fernández por su apoyo y presencia en medio de la comunidad salesiana, a la vez que llamó a la comunidad a permanecer en la unidad, fieles a Dios con el auxilio de María. (Para ver la galería de fotos, pinchar la imagen que sigue).
Durante toda la semana del 6 al 10 de noviembre se sensibilizó a la comunidad educativa sobre la importancia y valor de la diversidad, dando énfasis en la educación inclusiva y la no discriminación. Con el lema “Todos somos diferentes, pero en esta casa crecemos juntos”, las actividades buscaban generar conciencia en los estudiantes, profesores y asistentes de la educación sobre la realidad de las personas con capacidades diferentes. Se desarrollaron tres talleres sobre estrategias para enfrentar situaciones de desregulación emocional y conductual, hablemos de TEA para los asistentes de la educación; un taller fonoaudiológico sobre el cuidado de la voz para los profesores jefes y un taller de psicología para los apoderados.
Para acercarse aún más a las realidades, la Fundación Teletón realizó un taller para los alumnos de educación parvularia y educación básica, donde los niños participaron de actividades recreativas y de aprendizaje.
En la reflexión compartida a la comunidad educativa en la oración de buenos días, las profesoras Francisca Núñez en Sede Sur, y la profesora Sofía Sánchez en Sede Norte, se refirieron al significado de los conceptos de educación e inclusión, señalando que ambos están directamente relacionados, y significa que “todos, sin importar cómo seamos o de donde vengamos, tenemos el derecho de recibir una educación de calidad y ser tratados con respeto”.
“Cuando hablamos de educación inclusiva, nos referimos a que todas las escuelas deben estar abiertas a todos los niños, sin importar si tienen alguna discapacidad o dificultad especial. Todos merecemos tener acceso a una educación de calidad, porque cada uno de nosotros tiene talentos únicos y valiosos para compartir con el mundo”, puntualizó Francisca.
El 10 de noviembre, en la oración de buenos días de Sede Sur, se vivió un emotivo momento al escuchar el testimonio de Fernando Muñoz, exalumno sordo del CEST. Fernando compartió su vivencia como estudiante, sus dificultades, sus aportes, sus alegrías y especialmente su agradecimiento al CEST por el apoyo que recibió en su estadía desde el 2016 al 2019. Invitó a los jóvenes a no ser flojos, a esforzarse, porque si él pudo crecer profesionalmente, con su capacidad diferente, más aún lo pueden lograr los que no viven estas realidades.
La semana de actividades culminó con un compartir de los alumnos sobre sugerencias de cómo ser más inclusivos en los recreos de ambas sedes.
Durante todo el día 09 de noviembre visitó el Centro Educativo Salesianos Talca, los encargados y referentes de las distintas áreas de gestión a nivel nacional de la Inspectoría Salesiana en Chile. El objetivo de esta visita es acompañar al equipo directivo local y profundizar las orientaciones emanadas desde la Inspectoría Salesiana, para fortalecer los procesos y mejorar la calidad del servicio educativo.
La visita fue liderada por el padre Juan Miguel Cárcamo, delegado Inspectorial para la Pastoral Juvenil, quien en su mensaje destacó el sí de María, su actitud de hacer la voluntad de Dios, en el mensaje de Buenos Días, donde la comunidad educativa les dio la bienvenida. El sacerdote invitó a los estudiantes a hacerse la pregunta sobre la vocación, “¿a qué me está llamando Dios hoy día? ¿qué quiere Dios para tu vida”, puntualizó.
Asimismo, el padre Juan Miguel presentó a la comunidad educativa a los delegados de las áreas presentes, como Fredy Araya, coordinador ejecutivo de Pastoral Juvenil; Vicente Fritz, delegado de comunicaciones; Vanesa Paez, asesora pedagógica; Sebastián Arriagada, asesor TP y LET; y Karin Canón, asesora ambiente y apoyo.
La Comisión Inspectorial se reunió con los coordinadores de las áreas de Pastoral Juvenil, Pedagógica, Ambiente, Apoyo y Prevención, y con el encargado de PME, encargada de comunicaciones y el líder educativo tecnológico.
Esta visita se enmarca en las actividades de celebración de 135 años de la presencia salesiana en Talca, aportando importantes desafíos para los años venideros, sobre todo en el acompañamiento y aterrizaje de las orientaciones nacionales en la dimensión local de la escuela.
El Área de Apoyo y Prevención del CEST, reconoció a 19 estudiantes beneficiarios del Programa Pro-retención, que han demostrado durante este año, los valores de un alumno salesiano, como el esfuerzo en su proceso educativo y contribuir a la convivencia escolar en su quehacer cotidiano. Este reconocimiento se realizó el 03 de noviembre en una ceremonia de entrega de un notebook para los alumnos, ante la presencia del padre Director, Darío Navarro, el rector Reinaldo Castro, y las familias de los alumnos beneficiarios.
El padre Darío señaló que el colegio está preocupado de todos sus alumnos, y es importante seguir fortaleciendo los tres pilares fundamentales para el desarrollo de los estudiantes: colegio, alumnos y familia. El sacerdote se refirió a la realidad laboral que viven hoy los jóvenes. “El mundo es competitivo, podríamos verlo de otra manera, pero es así, y nosotros estamos preparando a nuestros estudiantes para este mundo, no queremos que estén en una burbuja, queremos que sean jóvenes proactivos en el mundo de hoy”.
Los alumnos reconocidos fueron: Elián Álvarez Olate de 2°A HC; Martín Andrades Rivera 2°A HC; Marcelo Valverde Piceros 3°B HC; Martín Valenzuela Rojas 1°D TP; Marco Bravo Ortiz 2°A TP; Yhon Espinoza Quezada 2°A TP; Maximiliano Sierra González 2°A TP; Cristóbal Velázquez Rojas 2°A TP; Carlos Diamantino Aguilar 2°B TP; Jhoell Jorquera Contreras 2°E TP; Joaquín Maturana Lastra 2°E TP; Benjamín Vega Parada 2°E TP; Leonardo Quezada Villar 2°E TP; Benjamín Hernández Castillo 3°E TP; Bairon Núñez Arellano 3°E TP; Felipe Ramos Carús 3°E TP; Matías Silva Bravo 3°E TP; Pedro Yañez Reyes 3°E TP.
Por tercer año consecutivo, el Centro Educativo Salesianos Talca, obtuvo la Subvención Pro-Retención, la cual está destinada a los establecimientos que realizan acciones para apoyar a los estudiantes en su proceso educativo, de modo que cumplan con éxito los 12 años de escolaridad obligatoria. Es decir, disminuir los índices de deserción escolar.
Con entusiasmo y alegría desbordante, cientos de estudiantes y las distintas comunidades del Centro Educativo Salesianos Talca, se congregaron el domingo 05 de noviembre, en el frontis del Establecimiento para participar del Desfile y Bendición de la imagen del Cristo Salvador, que por muchos años acompañó el frontis del CEST, y que se cayó con el terremoto 27/F de 2010.
Este evento, que celebra los 135 años de la presencia salesiana en Talca, luego de 5 años sin realizarse, vuelve con todo y junto a eso el compromiso de la juventud hacia esta institución, que ha dejado huellas imborrables en la memoria de todos los presentes. Banderas al viento, la banda de honor del Establecimiento y un espíritu de unidad se apoderaron de las calles, mientras los jóvenes y docentes desfilaban con orgullo.
En su discurso, el padre Darío Navarro, director de la Presencia Salesiana en Talca, manifestó que este desfile en la celebración de 135 años se hizo en honor a Cristo Salvador, cuya imagen se instaló nuevamente en el frontis del CEST, luego de 13 años, recordando que Jesús es el centro de todas las actividades educativo pastorales.
“Hace un tiempo atrás, cuando dábamos inicio formal a las actividades de los 135 años, reflexionábamos sobre la importancia de tener a Jesús en el centro de nuestra vida y cómo don Bosco nos había mostrado un Jesús resucitado, Buen Pastor. Ahí nos preguntamos ¿a qué Jesús le rezamos nosotros? Los salesianos en Talca rezamos a Cristo Salvador, que nos bendice con sus brazos abiertos, que nos recibe en actitud de acogida, que nos muestra que somos enviados a anunciarlo con alegría y optimismo, haciendo bien las cosas de cada día, que nos salva, es decir, que quiere que seamos redimidos, santos y felices”.
El padre Darío agradeció a todos los que hicieron parte de este proyecto tan anhelado, a la comunidad religiosa que lideró esta iniciativa, al consejo de coordinación del CEST que estuvo pendiente de su ejecución, al centro de antiguos alumnos, que impulsaron a confiar que era posible que el Cristo Salvador volviera a su lugar, a los padres y apoderados y al centro general que los representa, y a los alumnos representados en el centro de estudiantes que apoyaron con alegría esta iniciativa.
“Hoy realizamos este desfile en honor a Cristo Salvador, pidiendo su bendición para la ciudad de Talca”, puntualizó el padre Darío, para luego bendecir la placa de la imagen del Cristo Salvador.
Después, se bailó el tradicional esquinazo a cargo del grupo Peumayen, y se dio paso a iniciar el desfile. El estudiante Cristóbal Rojas de 2°BHC, acompañado de Rodrigo Olave de 2°B EGB, se presentaron ante el padre Darío Navarro, para solicitar autorización de inicio. Se realizó el encajonamiento de la Banda y comenzó un nuevo homenaje a la presencia salesiana en Talca, que durante estos 135 años han permanecido fieles al legado de don Bosco, educando y evangelizando a los jóvenes de esta provincia maulina.
Hicieron su presentación una delegación del Colegio Santa Teresita de las Hijas de María Auxiliadora, y la totalidad de los cursos del Centro Educativo Salesianos Talca, como también los grupos asociados a la Familia Salesiana. Los niños de básica desfilaron en tono comparsa alegre, todos disfrazados, en un ambiente alegre y festivo.
(Fotografías y pare de la redacción periodística es de los alumnos que participan en el Taller de Reporteros Salesianos en Acción).
(Para ver la galería de fotos, pinchar la imagen que sigue)